Amanecí en el colchón de mi habitación, con la luz del sol en la cara. Me quité el brazo que tenía encima. Alguna “títi” debió caer anoche entre mis sabanas. Me fijé en como estaba. Dave aparecía ante mis ojos.
-¿¡Que demonios!?
Despertó
-Te gusto lo de anoche eh bribón!
-¿Anoche? ¿Que hicimos anoche?
-Nada, renacuajo, te estaba tomando el pelo. ¡ Eres poca cosa para mi!
-Anda levanta, ¿como es que no fuiste a casa anoche?
-Demasiado borracho para conducir, siempre es mejor quedarse en casa.
-En tú casa.
Salí de la habitación y fui a la cocina. Prepare la cafetera y la encendí. Me dirigí al lavabo. Después de tomarme el café entre en la habitación que había enfrente de mi dormitorio. Esta habitación era mi paraíso. Era la habitación mas grande de la casa, la típica que la gente normal hubiese utilizado como salón. En la parte derecha de la habitación se encontraba una estantería con multitud de libros. Había un sofá negro bien cuidado y una mesita marrón que parecía nueva. Encima de la mesa un cenicero de los Rolling que ocupaba el centro de la mesa. Dejé mi café a un lado y cogí un cigarro. Encendí la tele que tenía, una televisión de 40 pulgadas recién comprada. Me tomé la taza y acabé mi primer cigarrillo. En el centro de la sala había una mesa de billar de las caras. A la izquierda se encontraba mi tesoro mas preciado, una batería Pearl de 6.700 euros con 8 platos, 9 cajas y 2 bombos. De taburete usaba un baúl en el que guardaba todas mis baquetas nuevas. A su derecha una papelera llena de baquetas rotas. Cogí las baquetas que se encontraban sobre la caja y comencé a tocar. Me pasé horas ahí dentro, como acostumbraba a hacer. La sala estaba insonorizada, por motivos que no vienen al caso. El resto de la sala ya lo comentaré cuando llegue el momento.
Pasada toda la mañana salí de la habitación. Dave seguía durmiendo la mona en mi colchón. Me di una ducha y prepare la comida. Mientras se preparaba despertó el viejo durmiente y me preguntó que había de comer. Después de comer nos dirigimos hacía el estudio de grabación y nos encontramos con el grupo. Dave sacó de su cartera un objeto que nos hizo sorprendió a todos y nos motivó.
CAPITULO 13 (Escrito por Mark)
Me desperté, salte de la cama y me estire produciendo un sonoro bostezo. Fui directo al salón donde me deje caer como un peso muerto en el sofá y puse la tele.
-perfecto las noticias, gente muerte por la mañana, me encanta… puta sociedad- dije asqueado
Después de un buen baño pille mi guitarra y empecé a improvisar, no conseguí nada, lo intente otra vez pero, nada, otra vez y nada, me pase horas intentando sacar algo de allí pero no saque nada.
Me coloque los cascos del mp4 y me fui con mi bici a dar una vuelta. Llegue asta las afueras de la ciudad, cerca de un rió, era muy solitario y relajante.
Encontré un pequeño banco de madera por ese camino que bordeaba el rió y decidí sentarme. Me urge en el bolsillo de la sudadera y encontré un paquete de tabaco lo abrí y encontré dos cigarrillos y uno liado, saque el liado y puede observar feliz mente k no era tabaco. Me lo fume, el humo entro en mis pulmones lo impregno todo y rápidamente subió y luego lo expulse, cada vez estaba mas relajado.
Mi mirada se poso en una rana que havia en el suelo.
-hola dijo la rana
-hostias
-no te asustes, soy tu inspiración
-¿estoy ciego verdad?
-muchísimo, bueno solo era eso asta luego
-dios, ¡adeu ozzy!
Dos horas después me desperte y me fui deprisa a mi casa. Llegue a casa, pille la guitarra y solté un solo que casi me meo encima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario